sólo para amigos: tour de force

vicking, el auto fantasma

Alejandro Dolina decía que era posible reconstruir un libro a partir de sus fragmentos.
Luego extrapolaba la idea y repetía la hipótesis pero prescindiendo del libro original.
Es decir, que mencionando o transcribiendo párrafos presuntos, en algún momento se termina delineando un contenido apócrifo.

    

 el cuadrado de peduzzi                    derossi 650

Hace unos días una persona se interesó en mi blog y me vi en la necesidad de listarle los contenidos más relevantes, a modo de "tour de force", un índice sugerido que pudiera dar al lector ocasional una idea aproximada del sentido del blog, obviamente, según mi propio criterio.

   
zunder 1500                            aerocar

La sorpresa fue descubrir que a partir de los capítulos señalados, se delineaba un modesto tratado, tal cual lo anticipara Dolina.

 
dellepiane coupe                             la historia del carrier envaselinado

Y como ya aclaré, la selección fue hecha con mi criterio, seguramente habrá, al menos, tantos criterios como lectores.
Es decir que la selección de cada lector implicara un libro diferente.

    
un argentino en lemans 1973             el edificio chrysler

Como lo leen, amigos, cada lector tiene la irrepetible oportunidad de suscribir una selección, lo que no es poco.
Seguramente habrá algún fanático que señalará "todos" y algún renegado que pondrá "ninguno", pero esas cosas siempre pasan.

  

dique san roque                                    el señor jodos

En cualquier caso, los invito a repasar los temas publicados, recordarlos o visitar los olvidados (sólo tienen que hacer click en las fotos respectivas).
Piensen que desenterrar un viejo texto es una forma de revivirlo, salvarlo del olvido.
También tienen esa posibilidad, que no es poco.

  
    el torino que no fue                                el ratón escandaloso

     
    reportaje a buby mahler                   bmw brutus

    
     citroen barbot                                   la historia de bristol en le mans

   
     historia del city of salt lake             napier railton


    napier railton by gaucho models         bac tsr-2

  
    white triplex                                         chenard & walker tank

 
      fiat lingotto                       vauxhall guildsman by matchbox

   
    el señor gerry anderson                  talbot t26

  
la historia del ferrari sin vidrios    mormon meteor
   
    
  el señor odell                                   cadillac le petit pataud

  

     cadillac le monstre                             estación 8

LAS INSUFRIBLES GAUCHO MEDITACIONES, NARRACIONES Y OTROS ABURRIMIENTOS

   

       de autitos y pin ups                                     el mark 5 de meteoro

  
    un caso para gaucho man                 diecast para niños y el futuro

   
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el oficio de coleccionar autitos


IMPERDIBLE, LA SECCIÓN "CONÓCETE A TI MISMO"

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That's All Folks!




Gaucho Man
el adecuado

redacción tema: feliz navidad y todo eso

POST NAVIDEÑO
SE RECOMIENDA SU LECTURA ENTONANDO VILLANCICOS.
ESE QUE DICE "JINGLE BELLS" MUCHAS VECES ESTARÍA BIEN

¿Existe Santa Claus?

Se han gastado hectolitros de tinta y resmas es de papel carta pidiendo los tradicionales autitos navideños, aunque también se asegura que nadie se ha topado jamas con el hombre de barba blanca y risotada "jo jo jo!".
Para poner un poco de luz en este asunto tan confuso, aquí llega Gaucho Man con su habitual crudeza cartesiana, presto a analizar al fenómeno navideño.
Suframos algunas consideraciones.

1.- Ninguna especie conocida de reno puede volar. No obstante, existen 300.000 especies de organismos vivos pendientes de clasificación y, si bien la mayoría de ellas son insectos y gérmenes, no es posible descartar completamente la posible existencia entre ellas del reno volador que sólo Santa Claus conoce. Pero no quiero darles falsas esperanzas, yo personalmente creo que es algo difícil.

2.- Hay unos 2.000 millones de niños (considerando únicamente a las personas con menos de 18 años) en el mundo. Pero dado que Santa Claus no parece que se ocupe de los niños musulmanes, hindúes, judíos y budistas, la cifra se reduce a un 15% del total (unos 378 millones, según las estadísticas mundiales de población). Según estas estadísticas, se puede calcular una media de 3,5 niños por hogar, por lo que estamos hablando de unos 91,8 millones de hogares (suponiendo que en cada uno de ellos, haya al menos un niño que se haya portado bien).

3.- Santa Claus dispone de 31 horas en Nochebuena para realizar su trabajo, gracias a los diferentes husos horarios y a la rotación de la tierra (se supone que viaja de este a oeste, lo cual parece lógico). Esto supone 822,6 visitas por segundo. En otras palabras, en cada hogar cristiano con un niño bueno, Santa Claus tiene 1 milésima de segundo para estacionar, salir del trineo, baja por la chimenea, llenar los calcetines, repartir los demás regalos bajo el árbol, comerse lo que le hayan dejado, trepar otra vez por la chimenea, subir al trineo y marchar hacia la siguiente casa. Suponiendo que cada una de estas 91,8 millones de paradas esté distribuida uniformemente sobre la superficie de la tierra (lo cual es falso, pero puede valer para los cálculos), hay 1,2 Km entre casa y casa. Esto da un recorrido total de 110 millones de Km., sin contar lo necesario para las paradas a hacer lo que cada uno de nosotros haría al menos una vez en 31 horas. Se deduce de ello que el trineo de Santa Claus se mueve a unos 1000 Km./sg, 3000 veces la velocidad del sonido. Como comparación, el vehículo fabricado por el hombre que mayor velocidad alcanza, la sonda espacial Ulises, se mueve a unos míseros 43 Km./sg. Un reno convencional puede correr a una velocidad punta de unos 24 Km./h.

4.- La carga del trineo añade otro elemento interesante al estudio. Suponiendo que cada niño sólo se lleve un presente de tamaño mediano (0,9 Kg.), el trineo transporta unas 321.300 toneladas, sin contar a Santa Claus, a quien siempre se le describe como bastante rellenito. En la tierra, un reno convencional no es capaz de transportar más allá de 150 Kg. Aunque el reno volador pudiera transportar diez veces esa carga, no bastarían ocho o nueve, sino que se precisarían unos 214.200 renos. Esto incrementa la carga (sin contar el peso del propio trineo) a unas 353.430 toneladas. A efectos comparativos, esto es unas tres o cuatro veces el peso de mi suegra.

5.- 5.353.000 toneladas viajando a 1000 Km./sg crean una resistencia aerodinámica enorme, que provocará un calentamiento de los renos similar al que sufre una nave espacial en su reentrada a la atmósfera terrestre. La pareja de renos que vaya a la cabeza absorberá 1 trillón de julios de energía por segundo, cada uno. En pocas palabras, se incendiarán y consumirán casi al instante, quedando expuesta la pareja de renos posterior. También se originarán unas onda sonoras ensordecedoras en este proceso. El tiro de renos al completo se vaporizará en 4,26 milésimas de segundo. Santa Claus, mientras tanto, sufrirá unas fuerzas centrífugas 17.500,06 veces superiores a las de la gravedad. Si Santa Claus pesara 120 Kg. (lo cual es incluso demasiado delgado), sería aplastado contra la parte posterior del trineo con una fuerza de más de 2 millones de Kg.

Resumiendo, si Santa Claus existió alguna vez y llevó los regalos a los niños en Navidad, ahora está muerto.
Jo Jo Jo!

jingle bells, jingle bells!

Gaucho Man
el navideño

redacción tema: se nos va el año

Ha sido un año difícil, signado por una veda de autitos impuesta por nuestro gobierno.
En realidad no fue una veda explícita pero de un día para el otro, los trámites de importación fueron tan engorrosos que prácticamente imposibilitaron cualquier compra al exterior.



La inflación tampoco ayudó y todo resultó en un aumentn pornográfico en los precios de los modelos importados.



Toda esta situación hizo que muchos coleccionistas se replantearan el hobby. Sobre todo aquellos que venían embalados con las mieles de los coleccionables a bajo precio.
Esta situación también impactó en  nuestro pequeño universo bloguero, que reflejó la baja de entusiasmo (Vasco, vuelva que lo perdonamos!).



Paradójicamente, los precios de los viejos modelos nacionales, otrora prohibitivos, quedaron relativamente nivelados con los modelos importados.



Nuestra humilde industria local, en realidad un emprendimiento artesanal en gran escala,
experimentó un modesto resurgimiento.



Hablando de la vitrina para adentro, las perlas más brillantes que ingresaron a mi colección fueron artesanales.
Un Berta de Ambrosio,



y una cupecita de filiación desconocida.



En el frente interno, mi producción artesanal fue poco onerosa.
Apenas un Dellepiane Coupé que me llevó varios meses de trabajo.



y sobre el final del año, un par de manos de pintura en un viejo Halcón que esperaba su hora desde hacía casi quince años.

 

Y por supuesto, el Morgan que me regaló mi hijo.


 
Fuera del plano coleccionable, en lo personal, tomé esta crisis como excusa para reflotar mi viejo proyecto de construis autitos en pequeñas series.



La serie M fue una aventura optimista que terminó con éxito relativo.
Juro que pocas veces había estado tan entusiasmado con esto del diecast.


En la foto de abajo, les comparto los proyectos para el 2015.
El blanco es un Zunder, injustamente relegado.



 En celeste y rojo el Chelco que ya conocieron en estado nonato.



Y en azul el máster de una serie H de Halcones (en primer plano la base con asientos).

 

 

Va a ser un año interesante, sólo hay que arriesgarse a vivirlo.



That's All Folks!



Gaucho Man
el atorrante