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viernes, 25 de octubre de 2013
rescate emotivo: renault gordini ratón escandaloso
Pensemos en 1966.
El parque del TC local se componía de "cupecitas" de los años treinta más o menos actualizadas pero en todos los casos eran dinosaurios de más de 4.5 metros, no menos de 1300 kilos y motores entre 3 y 4 litros.
La categoría venía evolucionando y dadas las libertades del reglamento, empezaron a mezclarse modernos "compactos" entre los viejos dinosaurios.
El término "compacto" venía de la tierra yanki, de cuando empezaron a fabricar Ford Falcon, Chevrolet Nova y algún Dodge con motor slant six.
Acá llegaron estos compactos al mercado y algún iluminado pensó en hacerlos correr oponiéndolos a las cupecitas.
El publico del TC era tradicionalista en extremo y renegaba de estos modernos compactos que venían a desafiar a las cupecitas en su territorio.
Así fue como un 13 de marzo de 1966, en el autodromo de Buenos Aires, el Señor Oreste Berta presentaba un Gordini TC a ser piloteado por el Señor Eduardo Copello.
El Gordini no sólo era más pequeño que las cupecitas sino que también era más chico que los compactos.
Las fotos son elocuentes, se nota la diferencia de tamaño, piensen además que el Gordini tenia motor de un litro, un pequeño 4 cilindros versus monstruos de 6 cilindros en línea o V8.
Al principio se lo miró con una mezcla de curiosidad y repulsión, como cuando uno mira un batracio disecado.
No faltaron los chistes aludiendo a la diferencia de tamaños.
Las miradas irónicas se acabaron cuando el Gordini logró el segundo tiempo y clasificó para largar en la primera fila.
Este desempeño tan brillante como inesperado le valió que un periodista lo bautizara “el Ratón Escandaloso”.
La preparación del Gordini Ratón incluía refuerzos en carrocería y modificaciones en suspensión, trenes rodantes y en el pequeño motor Ventoux que fue llevado de 35 a casi 100 hp.
Luego de largar, el pequeño Ratón picó en punta y se mantuvo por delante de los otros coches durante dos vueltas pero un problema menor lo hizo abandonar.
MORALEJA
Esta corta historia del Ratón cerró el destino de las cupecitas que habían alimentado nuestro TC durante más de veinte años.
FINAL NO FELIZ
Oreste Berta siguió trabajando en el Ratón pero un cambio de reglamento lo dejó afuera de la competencia.
That's All Folks!
Gaucho Man
el escandaloso
Fuente:
http://www.elsuplente.com/nota/14275/Proyecto-para-la-fabricacion-de-una-maqueta-de-Renault-Gordini.html
Etiquetas:
berta,
gordini,
raton escandaloso,
renault,
tc
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Contada la historia y hecha la presentación del coche, ahora no es difícil adivinar que en poco tiempo se viene un Gordini made in "Gaucho Models".
ResponderBorrarSólo resta esperarlo.
Será una miniatura única.
Abrazos!
ya va a llegar, es un tema personal que tengo con el aerógrafo, teneme paciencia
Borrar"No me multilpiques la potencia, simplemente divideme el peso".
ResponderBorrarLa historia me recuerda a la extincion de los grandes dinosaurios, en cambio sobrevivieron los perqueños mamiferos.
Un gran apodo lo de "raton escandaloso".
Un abrazo!
hola, la analogía es perfecta,
Borrary el apodo también.
Una buena pieza se avecina seguro
ResponderBorrarAcá en España era llamado el Coche de las viudas, ala
espera me hallo de ver esa joya
Un saludo
=))
y sí se viene.
Borrarya está casi listo, ahora depende de mi pulso.
un par de tdetalles que pueden ser el detalle ganador o arruinar todo el trabajo.
Anticipo de lo que vendrá más adelante...
ResponderBorrarSeguro que tan bueno o más que el artículo sobre esta "ratita" francesa.
Saludos!
voy a tener que cambiar de táctica,
Borrarme temo que mi discurso es muy previsible.
Quizás lo más loable es que eran extremos opuestos, bien podría ser un compacto de cilindrada similar, pero es justamante ser concepciones totalmente opuestas del auto lo que condimenta la historia del futuro modelo.
ResponderBorrares como la película del titanic, nadie podía imaginar que pasaría lo que pasó.
Borrary esas cosas me dan ganas de haber participado, de haber tenido algo que ver con la historia.
como llegué tarde, lo único que me queda es recordar la historia y subirme al carro de los vencedores, diciendo "yo soy un ratonista ortodoxo de la primera hora!"
Yo elogio el rescate y al ratón escandaloso, dándoles una tunda a los mas grandes de peso y tamaño en la pista.
ResponderBorrarSaludos !!
esa es la mejor parte, las fotos son muy elocuentes y no dejan mentir.
Borrarrealmente era un piojo.