DE POLONIA CON AMOR
El fenómeno se llamaba Carlos Satuszek, un polaco llegado a nuestras pampas escapando de una guerra que no se terminaba.
El hombre empezó trabajando como mecánico y luego empezó a correr un Mercedes K modelo 1929, acortado a serrucho, prestado por un oportuno mecenas.
Corría el año 1937, las carreras eran en ruta y las rutas eran de tierra.
Hubo algunos circuitos, pero también de tierra.
El Mercedes K pasó a ser una figura familiar en todas las carreras, y siempre con buenos puestos.
Tenía un motor demasiado potente y un chasis alto y angosto, una combinación muy difícil de dominar a más de 100 km, ni hablar si era sobre caminos no preparados.
Y era grande, mucho más grande que los otros autos.
Tan grande era la diferencia que en poco tiempo el auto fue apodado "El Ómnibus”.
EL FAMOSO COLECTIVO IMAGINARIO
El Mercedes era difícil de manejar debido a su gran peso y potencia.
Cuenta la leyenda que en Alemania lo llamaban "matadueños" (vaya uno a saber cómo se dice en alemán), y que Satuszek era uno de los pocos que lo podían domar y contar la historia.
El hombre tenía un manejo tenaz, impetuoso, muchas veces exigiendo más de lo que daba la máquina.
Hasta Stuttgart llegaron las proezas del polaco y en reconocimiento le enviaron un motor oficial con el turbo más grande.
En esos diez años fue cambiando de auto y los autos también fueron mutando.
Primero fue el Omnibus, luego un SSK, luego otro SSK y hasta experimentaron adaptando tracción delantera a un motor Mercedes.
Los SSK se usaban para carreras en circuito y el viejo Omnibus quedó para los Grandes Premios pero equipado con el motor de 7200 cc de SSK en vez del 6300 cc original.
Como ven, fueron varios autos que corrió, pero el fanatismo popular los confundía a todos en uno solo y todos entraron en la mítica denominación de Omnibus-
Promedios de más de 190 km en circuitos de tierra.
Fallece en 1937, manejando el Omnibus, una curva mal tomada, a baja velocidad, fuera de carrera, un accidente tonto, y la historia que termina con una muerte grotesca, inmerecida.
Los dejo con la sonrisa de este fenómeno, debe estar en el cielo corriendo en el Omnibus, esquivando nubes.
Si quieren ver el Gaucho Model terminado, hagan click acá.
That's All Folks!
Gaucho Man
el avenido
fuentes
http://www.laluneta.com.ar/nota?id=57520
http://importados.testdelayer.com.ar/clasicos/mercedesssk.htm
http://www.edicionuno.com.ar/nota-3190-carlos-zatuszek-primer-idolo-del-automovilismo-argentino-parte-ii
www.vivenaqui.com.ar
Impresionante, tanto el aparato como el piloto, ambos parecían estar hechos el uno para el otro, incluso ambos tristemente terminan a la vez.
ResponderBorrarMuy buen rescate emotivo.
Ese es el problema: cuando son tan unidos es difícil despegarlos.
BorrarLo bueno es que mejoran con el recuerdo y van derecho al mito.
Igualmente, el final es triste.
la verdad, no esperaba un final así, eso era muerte en competición o tratando de clasificar! Pero nunca en una curva despacito y fuera de competencia! Cosas de aquellos años...
ResponderBorrarDesconocía el auto, desconocía el piloto, usted siempre con el don de ilustrar!
En general, los eventos sorprenden la primera vez y luego uno se acostumbra.
BorrarCon la muerte no es así porque siempre es por primera vez y creo que el primer sorprendido es el mismo ocsiso, algo así como una sorpresa en primera persona.
Con el aprendizaje pasa igual, afortunadamente.
Muy buen recuerdo Gaucho, a Zatuszek lo "conozco" desde los setenta, cuando leí varias notas sobre sus hazañas en "El Gráfico" y "Corsa". Cambiando de tema, o buscando otra arista, es increíble la cantidad de polacos que, escapando de los nazis, llegaron al país en esos años; otro famoso, y a nivel mundial, fue el ajedrecista Moisés Mendel Najdorf.
ResponderBorrarAbrazo!
El problema no fueron los polacos arrivados, sino los nazis argentinizados.
BorrarNazis go home!
Exacto Gaucho! Los polacos fueron y son excelentes personas. El problema fueron los nazis, muchos de los cuales aun están entre nosotros. Entre ellos, y como ejemplo, un tal Doctor Joseph Mengele, que en esos años de posguerra hasta cenaba con un presidente que tuvimos por estas tierras y su famosa esposa...
BorrarMengele fue la cara conocida del fenómeno,
Borrarpero hubo muchos más, andá por Villa General Belgrano,
hay más alemanes que gente.
Conozco Villa General Belgrano y también La Cumbrecita (y, claro está, Bariloche), sus destinos predilectos.
BorrarA la gente de Odessa parece que le gustó la zona...
Pablo, pero yo no digo que traten mal a nadie! Ni en Bariloche ni en Córdoba; te pueden tratar bien, puede que la gran mayoría sea anti-nazi, pero que están, están... No te olvides de Erich Priebke!
BorrarMire esta porquería que encontré:
http://www.barilochenazi.com.ar/barilochenazi.html
¡Bardzo lindo samochód! La trasera de carro verdulero combinado con la elegante parrilla Mercedes . Y tiene además el encanto humanizado de ser una máquina con nombre y apellido , como el "Cuadrado de Peduzzi" y el "Tractor de Casá" , maravillas que he conocido en este blog .
ResponderBorrarNo puedo pensar que la muerte de don Carlos haya sido absurda ; todo lo contrario , me pareció asombrosa y afortunadamente coherente . Y si pensamos que no murió , que simplemente se comió la vida , el hecho tiene otro sabor .
Otro polaco egregio que se incorpora a nuestro acervo , junto al escritor Witold Gombrowicz , y a Roberto Goyeneche .
Un abrazo!
Ahora me doy cuenta que usted también colecciona polacos, voy a ver si tengo alguno repetido para cambiarle.
BorrarLas leyendas no mueren, sólo cambian según la voz y estilo del cronista.
Para todo lo demás esta la wikipedia.
¡Vaya preparando un post para el "Cilindros asimétricos de Martínez"
ResponderBorrarTengo que ver eso! Mande foto.
BorrarMecánicamente es muy interesante :
Borrarhttp://canchallena.lanacion.com.ar/1890592-escandalo-en-el-tc-acusado-por-hacer-trampa-el-guri-martinez-podria-acelerar-su-retiro
ahora entendí mejor.
Borrarel tc tiene esas cosas.
El TC es una fábrica de tramposos...
Borrara dónde hemos llegado
BorrarAl final el "matadueños" hizo justicia al apodo... qué lástima, tiene cara de buena gente (los polacos que he conocido personalmente siempre lo han sido, al menos para mí).
ResponderBorrarY el coche, sigue activo?
Lamentablemente, en los últimos años, el omnibus termino como auxilio mecánico transporte de los otros SSK mas modernos, y seguramente en ese momento ya no tenia su motor.
BorrarPor suerte quedo la leyenda.
Había leído esta historia en una colección de automovilismo deportivo histórico editada por La Nación hace como 20 años. Más allá de lo pintoresco, ese Mercedes K serruchado es una patada al hígado. Supongo era un SSK, ése era el nombre completo.
ResponderBorrarSaludos!
Primero fue el K recortado que se ve en las primeras fotos, este fue el omnibus original.
BorrarDespués, a este ómnibus le pusieron motores de SS y de SSK.
Luego, uso otros SSK, mas bajos y modernos, con mas trocha, pero la gente los confundía con el omnibus primigenio.
Hoy en día, cualquier mercedes de esos años es un posible omnibus.
La leyenda continua.
siempre me gustaron los autos tipo bacquet, este caso es hasta mas extremo, lastima no se haya conservado
ResponderBorrargracias
Borraren estos días estoy pensando cómo hacerlo...
no me pierdan la fe
Adhiero a don Cabo, usted siempre arrojando luz sobre personajes y/o autos no tan conocidos, se agradece la ilustración.
ResponderBorrarY es cierto, triste e insólito final para semajante piloto.
eso no es nada,
Borraresperá que empiece a contar historias verdaderes!