Translate

sábado, 12 de noviembre de 2022

las aventuras del señor danny - parte 1





CONTACTO EN AUSTRALIA

Poco antes de la cuarentena, trabé conversación con un coleccionista de la tierra de los canguros. Para mantenerlo en el anonimato, vamos a llamarlo Danny.

Chateando por FB, me enteré que el tipo es fanático de los microcars.
Recordemos que los microcars son esos autos muy chiquitos, de carácter básico, que abundaron en los años difíciles de Europa y de ahí se extendieron como concepto (y en algunos casos como diseño registrado) al resto del mundo.
Yo admití mi simpatía por el género y le compartí mi modesta reproducción del Derossi 650 y me gané su simpatía.

Danny era un soñador.
Inexplicablemente, estaba enamorado de nuestro Dinarg D-200 y tenía ganas de hacer una serie de reproducción de este modelo.
Para los que se acuerdan o no saben (como yo en ese momento), Dinarg fue una fábrica argentina, que en los sesenta produjo el modelo D-200, un poco más de 200 unidades, vean foto abajo.
Este es el auto que desvelaba a Danny, como ven, es tan cortito que apenas empieza a pasar, ya se acabó el auto!



Es que Danny era el titular de Microcar Models Australia (www.microcarmodelsaustralia.com.au), vean qué lindo logo que tiene (lindo y adecuado)!




LA CONEXIÓN AUSTRALIANA

Recién empezábamos la cuarentena, cuando Danny me preguntó si Argentina tendría un buen mercado para el D-200 en escala 1/43.
Le respondí que en ese momento la economía estaba muy débil, esperando devaluación e hiper inflación muy pronto.



Sí teníamos una porción de potenciales compradores pero dependía del precio; le cité el caso del Zunder de Autocult, que era una verdadera joya pero el costo del modelo importado superaba los USD 200.

Me mostró foto de un modelo artesanal de Dinarg, que tras una corta investigación, resultó hecho por Data Modelsun artesano local, vecino de este blog, por más datos les dejo el link.



Le comenté que la gran mayoría de coleccionistas argentinos prefería los muscle cars antes que los micro cars y le comenté la experiencia de Salvat y la página de FB, cuando la mayoría defenestraba a los microcars y clamaban por Chevys o Falcons.

Podía haber compradores dispuestos a comprar un D-200 pero muy pocos se atreverían a pagar más de de lo que costaba un Inolvidable Salvat (aproximadamente USD 10).

Pero Danny era un optimista nato y esperaba vender 30 unidades de Dinarg D-200 a los coleccionistas de nuestras pampas.
30 coleccionistas capaces de pagar mucho más que por un Salvat. Sí, un optimista de alto vuelo.


MADE IN AUSTRALIA

Danny me comentó que hacía los modelos en SMTS, Inglaterra.
Seguramente los lectores saben de SMTS mucho más de lo que sé yo.
Yo apenas sé que es una tradicional empresa inglesa, que trabaja desde hace unas cuatro décadas haciendo modelos 1/43 en white metal, algunos para su propia gama y otros por encargo, para otras empresas.
Acá es donde entra Danny con sus modelos MMA.
Me explicó que le hubiera gustado trabajar directamente con fabricantes chinos, pero exigían una cantidad mínima inalcanzable para el mercado de los microautos.



Pensemos que los microautos, tenían muy escasa difusión y generalmente sólo se conocían en los países donde eran producidos, obviamente con algunas excepciones: Isetta, Trojan, Messerchsmitt...
Los modelos más modestos como el D-200 difícilmente podían despertar interés fuera de nuestra frontera, lo que reducía considerablemente el mercado.



Volviendo a SMTS, el arreglo es que mandando las medidas y algunas fotos, se encargaban de buscar más fotos, hacer planos y matrices, y finalmente producir los modelos y entregar el producto terminado.
Acá les comparto algunos de los modelos que han hecho, siempre dentro de la temática microcar y en series pequeñas, de 40 ó 50 unidades.



Los modelos tenían un precio de 200 AU (dólares australianos), equivalente a unos USD 125.

Pensando en una eventual compra para estas pampas hice un costo aproximado.
El envío por correo podía ser aproximadamente USD 25, es decir que en nuestra aduana pagaría unos USD 75 en concepto de derechos e impuestos, lo que daba un costo total de 125+25+75 = USD 225 por autito.

Aunque hubiera muchos interesados en el microcar, el costo era definitivamente inaceptable para un mercado acostumbrado a los modelos de Salvat a USD 10 y así se lo expliqué a Danny.

Acá hay que decir que Salvat y sus modelos de precio contenido, no sólo saturaron el mercado, sino que fijaron un nuevo costo standard para los autitos.
Obviamente un modelo prémium tiene su valor y sigue costando arriba de USD 50, pero cada vez hay menos coleccionistas dispuestos a pagar ese valor.

Danny se sorprendía de que Salvat no hubiera sacado al D-200, y le expliqué de las quejas contra los microcares de los coleccionistas locales.
También es cierto que la situación económica obligó a Salvat a cortar la colección cuando estaba en su mejor momento, dejando varios autos fuera de la agenda (todavía extraño al Zunder).

Pero Danny estaba entusiasmado y empezó a preguntarme qué colores me gustaban más para el proyecto D-200.
Así fuimos delineando una serie de colores sesentosos, todos tonos pasteles muy apagados. Mi favorito era el blanco envejecido, quizás color marfil que se adivina en algunas fotos.



Para agosto de este año, Danny me preguntaba qué posibilidad tenía de vender a AUD 165 (aproximadamente USD 120), que quería fabricar 50 ó 100 unidades.
Le dije que con ese precio no esperara más de 20 unidades.
Como no entendía, le hice el pase a pesos argentinos, en ese momento USD 120 eran ARS 12752 (sin transporte ni derechos) y el salario mínimo que estaba en ARS 29160.
Pocos coleccionistas podrían gastar casi la mitad de su suelto en un sólo autito.
Y coleccionistas con un salario mayor al mínimo, conocía apenas unos pocos.
De alguna manera, le gustó mi análisis y dijo que haría entre 30 y 50 unidades.

Le dije que un amigo estaba haciendo al D-200 en 3D y que apenas había vendido unos pocos.
Ustedes ya conocen este modelo terminado, pueden visitar el post haciendo click aquí.
Si bien era un producto diferente, en otro nivel, da una idea del escaso interés en un microcar, aunque fuera de diseño y fabricación local.






To be continued...




Gaucho Man
el indomable




13 comentarios:

  1. Querido Gasset!!!!

    Ayer me preguntaron, gente que no es de este rubro, si conocía otros coleccionistas. Les dije que por supuesto, que hay muchos y comenté el tema de las ferias, blogs, exposiciones que uno conoce.

    Y alguien preguntó si había alguien que se destacaba más que el resto. Les dije que había alguien que sin tener en cuenta su colección, era el que más hacía por el coleccionismo. Y aquí hay una prueba de como disfrutar de un pasatiempo. Lo felicito por su manera de ver el coleccionismo.

    Su amigo australiano debe agradecer haber caído en buenos consejos. No conozco a muchos (ni a pocos) que puedan o quieran comprar un D200 a un valor que no sea los conocidos por Salvat.

    Espero la continuación de la historia.

    Saludos!!!!

    PD: Mis saludos al optimista australiano y dígale que nunca se de por vencido.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Amigo Ortega,
      Si de veras Usted conoce a ese benefactor apócrifo del coleccionismo, por favor no deje de presentármelo, va a ser un gusto pedirle que me invite un café con pizza para conversar sobre autitos!
      En cuanto a la venta de autitos australianos, es un gran desafío que yo ya doy por perdido. Pero quién me quita lo bailado!
      Le daré sus saludos al amigo Danny.

      Borrar
  2. Curiosamente estamos en medio de colecciones de microcoches europeos de kiosko, yo me aboné a la que acaba de aparecer editada por Planeta en España, del conocido sello Altaya. Dentro de nada verás los que vaya recibiendo en mi blog, ya edité dos entradas.

    Si quieres ayudar al australiano proporciónale una dirección de club de microcoches en Argentina. Seguro que algún socio compra. En España suele funcionar este tipo de relaciones, pero es verdad que el coste no sería tan innacesible como en vuestro caso.

    Pues nada, seguiremos pendientes.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. También me enteré de la enciclopedia de microcoches, y se la mandé a Danny en cuanto tuve la primicia. Afortunadamente, el Dinarg pasó desapercibido para la editorial (ojalá).
      Estuve en contacto con el club de Dinarg y te puedo asegurar que son más pobres que yo. Voy a ver qué hay de microcoches, creo que sí hay algo. De todos modos, hasta tener los autitos, no quiero mover ninguna ficha.

      Borrar
  3. P.d. la ventaja es que se envía un solo paquete a la asociación para los socios que se comprometan y los gastos de esta forma son menores y compartidos entre todos.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. La logística de la distribución es todo un tema, nuestra aduana es lenta, costosa y burocrática, cuando no son directamente deshonestos o ladrones de paquetes (o de contenidos, te entregan una caja abierta y vacía).

      Borrar
    2. y por una cuestión de ética, e impositiva (acá también tenemos intervenciones estatales que penalizan al remitente, al importe enviado y al destinatario), tampoco quiero manejar dinero ajeno!

      Borrar
    3. No, no dije eso, que ellos se apañen con los dineros. Tú solo los pones en contacto, y mucho que haces. En todo caso y por el bien del hobby ojalá salga todo bien.

      Borrar
    4. eso sí, lo que pasa es que no puedo hacer ningún contacto mientras no haya autito.
      el producto viene con mucha demora por el tema bélico, por lo que casi estoy perdiendo esperanzas.
      hay que cruzar los dedos!

      Borrar
  4. Que terco y aventurado el amigo australiano, pero que valiente también.
    Si sirve el dato, comento que a veces me ha salido mas barato, dígase mejor, menos caro, traer Tonkas y Die Casts de GB, Australia e incluso Canadá que de EUA. Es tan grande el país yanki que a veces lo que compras tiene que recorrer mas de medio continente por tierra y avión antes de llegar al centro de acopio y distribución de las empresas logísticas.
    También a veces si vale la pena, según lo que buscas.
    Buena suerte a Danny en su empresa y cometido.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Sí y Sí y Sí.
      De todos modos, te hago este comentario que me hicieron hace muchos años:
      Una cosa es el hobbie y otra cosa es el negocio.
      El negocio es para ganar plata y el hobbie te hace gastarla.
      Te doy un ejemplo simple:
      Si a vos te gusta mucho el R18, y tenés posibilidad de fabricar autitos, tu primer impulso va a ser fabricar R18.
      Pero si pensás el negocio, no te podrías a fabricar un modelo que ya fue fabricado por Solido, por Ixo, por Galgo y en escalas chicas por Buby y Majorette y en escala grande por Solido y Ottomobile.
      Mi recomendación es pensar el negocio, aunque tengas que hacer el modelo más horrible, que vos lo hacés para ganar plata, aunque no te guste el modelo.
      Cuando ganes plata te comprás cinco reproducciones de cada uno de los listados más arriba, o le encargás uno específico y firmado a Chip Foose, hecho de oro y con diamantes.
      Pero para ganar plata, tenés que vender, aunque sean los que menos te gusten!
      Yo me temo que Danny esté mezclando hobbie con negocio.
      Ojalá le salgan bien las dos puntas del proyecto.

      Borrar
  5. Muy curiosa la historia y el tal "Danny" no podía haber elegido mejor conocedor del mercado que tú y por lo que acierto a comprender no le augurabas un buen negocio, aunque si el tipo le sobran "los cuartos" como decimos por aquí y "la plata" como decís por allá, pues olé por el y adelante.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Es difícil de definir.
      Más autitos es un crecimiento para el coleccionismo y coleccionismo.
      Obviamente, eso tiene un precio que no todos están dispuestos a pagar (hablo de coleccionistas y fabricantes).
      La definición está en un delicado equilibrio de oferta y demanda, que no siempre dejará contentos a todos.
      Ojalá salga todo bien.

      Borrar