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viernes, 26 de junio de 2015

el especial de los viernes: shelby cobra 1/43





En si habitual espacio dedicado al arte culinario, Gaucho Man se complace en presentarles, en carácter de total exclusividad, la receta del Cobra a la Shelby.
Como todos saben, se trata de un plato, aparentemente sencillo, pero puedo asegurarles que poniendo atención en la preparación y la originalidad de los, ingredientes, les deparará sensaciones inolvidables.







INGREDIENTES

- Un deportivo ingles de marca AC que originalmente usaba motores Bristol (que no eran otra cosa que BMW construidos bajo licencia), voluntariosos pero obsoletos.
Un motor Ford V8, con siete litros bien macerados.
- Un chasis en forma de escalera, sencillo, pero con mucha rigidez al paladar.
- Para dar sabor, agregar guardabarros esanchados, y ruedas sobredimensionados. Recomiendo no exagerar este punto porque ya hay muchos imitadores que lse encargaron de hacerlo, con resultados discutibles para los paladares sensibles.







PREPARACION

- Tomar un AC sin motor y colocarle el motor yanki.
- Mezclar cuidadosamente pensando en la cantidad de carreras que el Cobra va a ganar.
- Agregar los elementos saborizantes mientras discute si el Cobra es un auto inglés o yanki, piensen que cuando ganaba carreras, entre AC, Ford y Shelby se disputaban la paternidad del fenómeno.
- Ponerle frenos y suspensión adaptados a la mayor exigencia, pero no olviden que Shellby no fue el primero en injertar un V8 yanki en un chasis británico (y si no me creen, recuerden a Allard ).
Servir bien caliente, decorando con motivos deportivos, a gusto.







BON APETIT

Saborear pensando que no es mucho más largo que un Golf de las primeras generaciones pero con motor cuatro veces más grande.







FELICITACIONES AL CHEF

Luego de la comilona, mientras eructan o vomitan en la maceta, les cuento de los modelos, en orden de aparición;

El negro es de Bang, que antes había sido Box Model, un casting que ha recorrido un largo camino y todavía tiene vigencia gracias a unas ruedas increíbles para los treinta años o más que tiene.

El amarillo es de Solido, y tampoco es de horneada reciente, estimo su lanzamiento circa año 2000, es decir unos diez o quince años después que el Bang.

El azul es Yat Ming, una reproducción de bajo costo pero mucho esmero en la cabtidad de insertos y proporciones.

También hay uno rojo de Spark pero ya es viejo conocido y no quise agregarlo en esta degustación porque la verdad es que gana por afano.


Para el postre, y como curiosidad, les comparto un simpático Gaucho Model hecho en 1993.



Si bien en esos años era un motivo de orgullo, a los ojos actuales es un rejunte de todo lo que no debe hacerse.



Por favor sean indulgentes y piensen dónde estaban ustedes hace 22 años,



sin olvidar la disponibilidad de fotos e información que había en esos extraños tiempos sin internet y sin plata para comprar libros especializados (que tampoco eran muchos).



Cuento con su amable complicidad.



That's All Folks!



Gaucho Man
ei retenido










jueves, 11 de junio de 2015

rescate emotivo: el tractor de casá






El Señor Casá comenzó a correr en 1961. Su primer auto era una cupecita de segunda mano, con la que no tuvo mucha suerte.



En 1962 estrena su segundo auto, una cupé Ford 1940, equipada con un motor V8 modelo 1946 y una ensalada de componentes especiales específicos (árboles de levas, aros, pistones, etc).
Quizás por su perfil aerodinámico, o por su indestructibilidad, el fenómeno fue apodado "El Tractor".



Con este coche corrió desde 1962 hasta 1967, obteniendo títulos de subcampeón en 1966 y tercero en 1965 y en 1967.
Para que se entiendan el furor y exigencia de la actividad, por ejemplo, les comento que en 1963 hubo cuarenta carreras, algunas de varios días de duración, es decir que se puede asegurar que corría al menos una vez por semana, y siempre con el mismo coche.



Con el tiempo, la categoría se revolucionó con cambios reglamentarios que dejaron a las cupecitas obsoletas de un día para otro.



Buceando en la web descubrí un par de comentarios que describen la personalidad de Casá, y también el espíritu de la categoría.



"...corro porque me gusta, a veces me critican porque cambio de acompañante todas las carreras. Pero a mi me place correr con amigos y ademas mi auto no se rompe nunca, para que quiero un mecánico."



"...que quede claro que para mi las carreras son diversión y por eso las quiero compartir con amigos. Si fuera un profesional pensaría distinto, pero no lo soy...."



"...Mucha de esta gente que corre tiene la sangre caliente y si pudieran querrían ganar antes de largar la carrera... si usted empieza queriendo ganar la carrera desde el principio, va a tener veinte corredores al lado suyo; en cambio a mitad de carrera, sobre todo en las exigencias, que obligan a parar para reabastecer, usted se va a encontrar que adelante suyo tiene cinco o seis competidores para pelearlos y de ellos, la mitad vienen heridos; entonces es más fácil pelear el resultado".



Pero miren las fotos (todas tomadas de la web) y vean cómo corría, cómo saltaba o cómo doblaba, piensen que eran caminos de tierra sin preparación y que hacían promedios de 200 por hora.
Espero presentar el Gaucho Model antes de fin de año.





That's All Folks!



Gaucho Man
el avieso




Fuentes:
libro TURISMO CARRETERA - Una historia atrapante - Volumen II
http://www.lanacion.com.ar/567142-murio-eduardo-casa
allecimiento / Automovilismo
http://www.museofangio.com/es/visita-virtual/museo-fangio/8-hombres-y-maquinas-la-pasion-del-tc/88-ford-v8-tc-el-tractor-eduardo-casa/


jueves, 4 de junio de 2015

bmw iseta - schuco 1/43


A medida que pasan los años, el pasado nos asalta en cada esquina.
Cada uno tiene su historia y los asaltos se dibujan sobre dicha impronta.
Me ocurre seguido, la sensación de estar en un lugar que tiene o ha tenido autitos, un negocio, taller o casa de coleccionista.



Alguna misteriosa combinación de calles  una esquina sospechosa, o una casa secreta, un recuerdo inesperado, o todo junto, me sorprenden dentro de un deja vu en diferido.
Uno sabe que en el local donde ahora funciona una agencia de viajes, antes había una juguetería con autitos, hace casi cuarenta años.
O que en una casa perturbadoramente parecida a esa, vivía el tío de un amigo que tenía una colección increíble.
O quizás una sensación más indescriptible aun, tan personal como incomprobable.
Un sexto sentido o un presentimiento.



El hemisferio pensante argumenta que las sensaciones son imperfectas y que todo es un engaño de nuestro subconsciente.
No obstante, uno olfatea el aire como un alce en celo, mira a los costados para reconocer la señal secreta, la puerta mágica que nos muestre el camino a ese recuerdo escondido, al tiempo que el corazón palpita como si nos hubiéramos encontrado con nuestra ex en el ascensor de un edificio público, su camisa desabrochada mostrando un escote conocido, y flotando entre la carne tentadora, un autito igual a este



Hablando de recuerdos, hoy les presento este simpático huevomòvil, el pequeñín de la familia BMW, representado por Schuco.

El modelo abre la puerta delantera mediante un complejo sistema de dos bisagras en serie.
Lamentablemente el autito está encerrado en la vitrina y no tengo fotos con este detalle de apertura pero les aseguro que es una pequeña maravilla.
El modelito cumple con mucha simpatía y justifica los mejores recuerdos.



Pero ahora se va a hacer noni.



That's All Folks!



Gaucho Man
el hirsuto