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jueves, 28 de junio de 2018

historieta del TC y SP - parte 11 - 1970 el le mans argentino






Esta saga empezó de casualidad y si la termino va a ser también de casualidad.
Si quieren ver la primera entrega vayan a este post.
La entrega anterior está acá.
La entrega siguiente está acá.


1970 - EL LE MANS ARGENTINO

A comienzos de 1970 se corrieron los 1000 Kilómetros de Buenos Aires.
Este fue un evento internacional que contó con la presencia de los equipos más importantes del mundo.
Este evento permitió que muchos de nuestros constructores tomaran contacto con sus pares foráneos, ganando en inspiración y nuevas ideas.
Después de las comparaciones de rigor, el constructor Alain Baudena comentaba que los coches europeos estaban no más avanzados en materia de chasis, excepto por algunos accesorios como frenos, pinzas, llantas; aunque en términos de motorización la diferencia era sideral.


Luego de tan inspiradora visita, los constructores repasaban sus modelos con la miras al nuevo año.
Recordemos que el reglamento de 1970 ya había bajado la altura mínima de los autos y también permitía autos abiertos.
Esta configuración es más conveniente para correr, hablando en términos aerodinámicos.
Así fue que varios pilotos y equipos modificaron sus autos bajando el techo, o directamente recortándolo.
De otro modo quedarían fuera de competencia.


+ Pronello preparaba el Huayra Spider, es decir un Huayra sin techo.


+ La gente de Copello modificaba la cola y trompa del Numa con la inspiración puesta en el Porsche 917.


+ En los talleres de Baufer se trabaja en el modelo para Cupeiro, que tendrá una cola extra large quita y pon para adaptar el modelo para las carreras en circuitos rápidos.


+ El Pájaro Dorado de Pauloni también fue despojado de su techo y convertido en Spider.


+ Nuevos autos para Formar, sin alerones ni promontorios en el techo.



Pese a tanta innovación, o quizás a causa de ella, la primera carrera sólo tenía dieciséis anotados.
La sensación general es que el receso estival fue insuficiente para que los equipos pudieran rearmarse en términos económicos (buscar patrocinantes), deportivos (movimiento de pilotos) o técnicos (reformulación de autos).


Pronello decía "el mejor equipo es el que tiene más plata y recursos", y no le erraba.
Es que las automotrices inyectaban mucha plata al negocio.
En cualquier caso, los meses de receso marcaron la nueva tendencia con puentes De Dion, motores con más potencia gracias a nuevas tapas de cilindros y carburación mejorada.

Ya en los primeros meses del año, Formisano presentó dos autos para Pairetti y Marincovich (ya conocidos del blog).


También se vió Alguna Liebre III (se me perdió la foto, usen google).

En líneas generales, los autos fueron migrando a un diseño más bajo, fuera por el techo sin suplementar o por la configuración spider.


Los pilotos manejaban con las asentaderas casi apoyadas en el tren trasero.



OTRA VEZ SOPA

A lo largo del año fue surgiendo el descontento por la calidad del espectáculo.
Los autos eran poco confiables, a la hora de largar la grilla se veía muy pobre y cuando se trataba de correr se empezaban a romper y abandonar. 
Se buscó mitigar los abandonos corriendo series de pocos kilómetros, aunque tres series de 20 vueltas era poco para cualquier categoría.


Indiferente a todo esto, el público exigía una adrenalina que el espectáculo no podía ofrecer, fuera por limitación de las máquinas o de los pilotos.
Como ejemplo, en la carrera de Paraná largaron 16, hubo diez abandonos y sólo seis autos cruzaron la meta.
Para junio, a siete carreras corridas, el promedio de llegados estaba en el 51%, lo que daba un 49% de abandonos.
Este 49% proyectado sobre carreras de doce autos significaba seis autos terminando la carrera, y sólo uno o dos peleando la primera posición.
Para empeorar, estas peleas por la primera posición no se debían a idoneidad de auto y piloto sino a la disponibilidad. Es decir que el primer puesto se peleaba entre los que iban quedando después de los abandonos.


En junio se estrenó el Chelco II, que desde afuera era casi igual al anterior pero con techo más bajo. Con este auto salió campeón García Veiga y pongo foto abajo de todo.
En la foto de abajo el Berta spider precedido por un Chelco II con techo bajo.


Mientras, los sigo atosigando con fotos varias.
En la de abajo se ve un Huayra Spider, un Gentile Chevrolet y atrás un Formisano.


Hacia Julio se corrieron los 500 Kilómetros de Buenos Aires, en la que los SP compartieron el Autódromo de Buenos Aires con los TC-A (se acuerdan los TC más "futuristas" como ser Truenos y toda esa cosa?).
El resultado fue una carrera con muchos modelos y mucha diversidad, pero lamentablemente no hubo muchas màs asì.
También en esa carrera tomó parte un Chevy chileno sobre el cual voy a volver algún día, cuando tenga el autito, por el momento los dejo con una foto.




Al final, tras 17 fechas en que corrieron entre 12 y 26 corredores (nótese la desparejidad del número) el campeonato de 1970 quedó así:

Garcia Veiga con Chelco Chevrolet



Cupeiro con Baufer Chevrolet


Ruesch con Trueno Sprint Chevrolet (noten que es auto viejo, todavía tiene el techo alto)




To be continued...



Gaucho Man
el obvio





Fuentes:
Enciclopedia TC Una Historia Apasionante
Revista Ruedas Clásicas – Edición Especial SP Argentinos - Hugo Semperena
Historia Automovilismo Argentino - La Nación
Revistas Automundo
Ugo Garibotti
http://sportprototipoargentino.blogspot.com/









viernes, 22 de junio de 2018

dossier: el misterio del trueno naranja





EL DELICADO SONIDO DEL TRUENO

Seguimos con el sonado caso del Trueno Naranja.
Recordemos la funesta historia del Prototipo Ford, del que se construyeron dos unidades y las dos resultaron destruidas en accidentes fatales para corredores y copilotos.



Ante tanto muerto, Ford se borró del proyecto dejando al director de equipo Horacio Steven con un tercer chasis huérfano.
Ahí aparece el corredor Carlos Pairetti que buscaba un auto y se entusiasma con el ex-Prototipo.
Pairetti encargó algunos cambios (motor Chevrolet en vez de Ford, un tanque de nafta en posición trasera en vez de dos tanques laterales y una cola con spoiler para mejorar la tenida).
El resultado fue el Trueno Naranja.





DÍAS DE TRUENO

Una conocida anécdota cuenta que el auto estuvo terminado unas pocas horas antes de la presentación en público, pero faltaba la pintura.
Era tarde, las pinturerías estaban todas cerradas y en el taller sólo había un par de tachos con pintura roja, blanca y amarilla, aunque ninguno tenía suficiente cantidad como para pintar el auto.
La única posibilidad en esa jornada trasnochada fue mezclar todos los colores y sumar volúmen pintante, resultando en un color naranja sin precedentes.

El auto salió a la pista y tras un minuto de desconcierto, fue aclamado por la hinchada, entrando en la inmortalidad del subconsciente colectivo.
Acá abajo una foto del Trueno sin publicidades, quizás sea el retrato de ese primer instante mágico.



Técnicamente su nombre oficial era Fast Chevrolet, aunque la tribuna lo bautizó como Trueno Naranja.
Según Pairetti, el auto era muy difícil de manejar, ninguna maravilla.
De todos modos, ese año de 1968 lo vió salir campeón de TC y la gloria fue imparable, el fenómeno se hizo leyenda.



Steven hizo luego dos truenos más: uno dorado y otro blanco que fueron identificados como Trueno Dorado y Trueno Blanco respectivamente (la tribuna no era precisamente original a la hora de bautizar autos). Estos autos fueron corridos por otros corredores (Cacho Fangio y Di Palma) en TC y SP con diversos resultados.
Estos truenos fueron iguales al naranja pero no tanto.
Les dejo fotos para jugar a las siete diferencias.

Acá el Dorado:



Y acá el Blanco:




LA HISTORIA DESPUÉS DE LA HISTORIA

En cuanto al Trueno Naranja original, el corredor Pairetti se fue a correr a Europa y lo dejó en préstamo a otro corredor (García Veiga) que no pudo repetir la campaña del fenómeno anaranjado, se ve que de veras el auto no era para cualquiera.
Aparentemente fue vendido a un corredor de apellido Bouvier.
Si mal no recuerdo, el Trueno Dorado fue vendido y destruido, quizás en el sur del país.
Y dicen que Bouvier compró el Trueno Blanco.

Volviendo al naranja, Bouvier corrió algunas carreras de SP con resultado olvidable.
En ese momento cambió el reglamento permitiendo los autos sin techo, y según alguna revista, Bouvier le serruchó el techo al Trueno.
Esta es quizás la última foto del Trueno Naranja, ya serruchado.
Acá se pierde la historia del auto.



Cuesta imaginar al fenómeno sin techo, encontré este dibujo de la web aunque me temo que sea más un identikit bien intencionado que un documento fundamentado. 



El rastro se pierde luego de esta operación, el Trueno no fue visto nunca más y hay versiones de que fue vendido como fierro viejo a unos gitanos.
Hay una leyenda urbana que dice que un mecánico vio pasar al gitano transportando restos de un auto color naranja y reconoció la trompa de la leyenda y se lo compró para quedársela como souvenir para uso particular.

Hace unos años Pairetti presentó un Trueno Naranja.
Aparentemente este auto está firmado por la Fundación Fangio y un carrocero radicado en Estados Unidos llamado John Gaffoglio.
Algunos aplaudieron con entusiasmo al Trueno resucitado y otros lo denostaron con desprecio aduciendo diferencias con el original.
Miren el marco de la ventana y la puerta, el remate inferior de la cola, el spoiler y van a notar diferencias.
O la caída del techo a la altura de la rueda trasera.





La conclusión final es que este Trueno es una copia mal hecha, podemos llamarlo Fake Trueno.

Luego apareció otro Trueno Naranja, supuestamente el original restaurado por Bouvier.
Este Trueno tiene formas más familiares (ver abajo).
Por lo que veo, me arriesgaría a asegurar que se us
ó para hacer el modelito de la enciclopedia.



Hace poco tiempo, Bouvier restauró una Liebre y en la foto del auto restaurado, en segundo término se veía una cola naranja conocida.







Pero si dijimos que la cola del Trueno original está tirada en un galpón, 
cómo se entiende que este Trueno sea el original?
O será el original con una cola nueva?


ELEMENTAL, MI QUERIDO SHERLOCK

Acá entramos en el campo de las conjeturas.
El perfil de las puertas, en su borde superior y a la altura del zócalo remite a los Truenos Blanco o Dorado.
Como el Dorado fue destruido confirmado, los especialistas aseguran que el naranja restaurado en realidad es el blanco repintado.

Hay un detalle que podría definir el tema:
+ El Trueno Naranja original se hizo sobre un chasis de Prototipo Ford, es decir que tenia anclajes para motor Ford V8. Luego se agregaron anclajes para alojar el motor Chevrolet de seis cilindros en línea pero se sabe que también conservaba los anclajes originales para V8.
+ Los otros Truenos Naranja y Dorado se hicieron desde cero pensando en motor Chevrolet, por lo que solamente tienen anclajes específicos para motor lineal.

Es decir que una simple inspección visual en el vano motor debería esclarecer la cuestión aunque lamentablemente nadie ha llegado tan profundo en la investigación.



Resumiendo, hay cantidad de indicios pero ninguna confirmación.
La respuesta debería darla el Señor Bouvier pero él insiste en la veracidad de su Trueno restaurado.

Si alguno ha visto la trompa del Trueno original colgada en el taller de la leyenda urbana,
si alguno ha visto el vano motor del Trueno restaurado,

si alguno se tomó el trabajo de comparar las puertas de los Truenos Dorado/Blanco con el Naranja original y el restaurado,
si alguno se interesa por esta trama,
quizás pueda aportar las piezas que necesitamos para completar este rompecabezas naranjado.

Hasta entonces me despido.




That's All Folks!




Gaucho Man
el insípido




fuentes:
http://www.historiatc.com.ar
http://sportprototipoargentino.blogspot.com.ar
https://es.wikipedia.org/wiki/Fast-Chevrolet





Para todos los que quieran más Gaucho posts sobre el Trueno Naranja, les dejo los siguientes links:

Trueno de Ambrosio
Trueno de Salvat
El último Trueno
Trueno Gaucho parte 1
Trueno Gaucho parte 2
Trueno Gaucho parte 3
Trueno Gaucho parte 4
Trueno para armar

Prototipo Ford
Prototipo Ford Gaucho
Prototipo Ford Gaucho, instructivo



viernes, 15 de junio de 2018

trueno naranja - enciclopedia tc 1/43






AL GRAN TRUENO ARGENTINO SALUD!

Es difícil explicar el sentimiento que despierta este fenómeno en el inconsciente colectivo.
Todos lo adoran, y buscan reconocerlo, y aunque estén mirando un McLaren de color similar, gritan "El Trueno Naranja!" con una sonrisa de oreja a oreja.

Quizás fuera el más espectacular, su línea, el color, rompieron e irrumpieron con todo lo que había antes; el día que salió a la pista, todos los otros autos fueron viejos.
Si bien clasificaba como TC, de alguna manera fue el primer SP. 
Seguro que fue el primero? No olvidemos al Prototipo Ford y a la Garrafa, que lo precedieron.



Hay cierta mística, quizás podemos decir que hacía falta un auto así y justo apareció éste.
También hay que dar algo del mérito al conductor Carlos Pairetti que sacó el auto campeón en 1968.
No acostumbro a detenerme en los corredores pero quizás haya que hacer una excepción.
Un periodista había bautizado a Pairetti "Il Matto" y luego el apodo fue adoptado por otros periodistas y el público en general.
En la lengua itálica, Matto significa "loco", aparentemente el hombre aceleraba donde la prudencia aconsejaba frenar.
Y ya se sabe que a la gente le gusta ese tipo de fenómenos que cabalgan al filo de la suerte, entre la magia y la imprudencia.




PRIMERAS IMPRESIONES 

En esta semana se puso a la venta el Trueno Naranja de TC, número nueve de la Enciclopedia de TC.
No me voy a detener en los detalles porque seguramente el Cabo y Cruiser los van a desglosar cabalmente.



Pero les quiero compartir mi experiencia.
Lo primero fue verificar el estado exterior y hay que decir que resulta inmejorable.
Yo hubiera preferido ruedas un poco más grandes (sobre todo más anchas) pero no es un tema que vaya a desvelar a nadie.
El capot también se ve demasiado naranjado, se echa de menos el dorsal sobre el costado derecho.



Lo siguiente fue mirar por dentro, hacía tiempo que no desarmaba un autito.
Hay que decir que estaba estrenando un destornillador de cabeza triangular que me facilitó la tarea de sacar autito de base y me animó a seguir buscando tornillos.



Mirando adentro, debo decir que también me sorprendí gratamente, sobre todo con el tratamiento de la cabina.
Lamentablemente el acabado casi monocromático y la poca generosidad de las ventanas van a privar a la mayoría de los mortales de este modesto espectáculo.
De todos modos, vislumbro muchos profetas del pincel haciendo maravillas para que tampoco puedan verse por esas ventanas miserables que tiene.




ANATOMÍA COMPARADA

Recordarán que hace un tiempo estuve haciendo un molde para clonar Truenos.
En tal sentido, decidí que este Trueno coleccionable era una excelente oportunidad para verificar las cotas del Trueno Gaucho.
La foto no miente, hay que decir que no estuve tan desubicado.
O el Trueno Gaucho está excelente o el chino matricero repitió los mismos errores que yo.



s arriba mencioné al Prototipo Ford y su fatídica historia como antecesor directo del Trueno.
Yo venía trabajando una versión Gaucha del Prototipo Ford, que también puse lado a lado para comparar proporciones y medidas (no tan mal como esperaba).



Como ven, el Gaucho Model era macizo para no complicarme la existencia con el interior y los transparentes.
Aunque sí me venía jugando con las luces, recuerden que las luces del Prototipo original tenían demasiada presencia como para ignorarlas.



Otra diferencia entre el Trueno y el Prototipo era la cola: el Prototipo era más angosto y no tenía el alerón con cola de pato.



Finalmente decidí hacer un collage en 3D.


PRECAUCIÓN: IMÁGENES CRUDAS, LA PERMANENCIA DE NIÑOS FRENTE A LA COMPUTADORA ES RESPONSABILIDAD DE LOS SEÑORES PADRES.


Torno, sierra, lima y removedor de pintura (no saqué fotos despintado).





Además de recortar la trompa del Trueno, debí recortar el alerón cola de pato y afinar la trasera.
Este es el punto más complejo, porque el Prototipo era tan angosto que dejaba ver parte de las ruedas.
Y el Trueno coleccionable no tiene mucho material para limar, todavía no sé cómo resolver ese punto.



Como comentario, les comparto un acercamiento de la unión (aún no empalmé las partes, no tengo mucha idea cómo empalmar metal con madera balsa).
La sorpresa fue el ajuste casi perfecto de las partes.
Insisto: o mi trabajo fue perfecto o el chino es tan inútil como yo.



El desafío está planteado, todo sea por tener un Prototipo Ford con interior y transparente.
Y único.
Hablando de único, seguramente alguno está derramando una lágrima por el Trueno recortado.
No se preocupen, tengo repuesto!






That's All Folks!



Gaucho Man
el autoayudado




Para todos los que quieran más Gaucho posts sobre el Trueno Naranja, les dejo los siguientes links:

Trueno de Ambrosio
El Misterio del Trueno
El último Trueno
Trueno Gaucho parte 1
Trueno Gaucho parte 2
Trueno Gaucho parte 3
Trueno Gaucho parte 4
Trueno para armar

Prototipo Ford
Prototipo Ford Gaucho
Prototipo Ford Gaucho, instructivo